El Bernabéu ama a Cristiano

• Hizo un 'hat-trick' en un visto y no visto, en diez minutos

• Sustituido y ovacionado en el minuto 73 después de su exhibición

  
  

  

  
  
  
  
Cristiano Ronaldo está enchufado, siempre lo está. El portugués le metió tres al Getafe en diez minutos y se retiró sustituido después de otra demostración de pegada descomunal. El Santiago Bernabéu le ovacionó como se merece. Está enamorado. El 7 le mandó un aviso al Barcelona, rival este miércoles en la ida de las semifinales de la Copa del Rey. Está caliente. Tiene las pilas cargadas. Eso sí es madridismo.

Cristiano hizo un 'hat-trick' en diez minutos, desde el 62' al 72', y coloreó sus tantos con diferentes tonos. Firmó el primero en su cuenta particular, segundo del Madrid, cruzando con la izquierda una contra lanzada por Özil. El 3-0 lo hizo de cabeza, fusilando a Moyà después de un gran servicio de Di María al segundo palo. El tercero lo transformó de penalti. El guardameta, felino en el Bernabéu a pesar de los cuatro goles recibidos, adivinó la intención de Cristiano, pero la violencia del remate no le dejó responder. El gol, como todos, se lo dedicó a su hijo y su madre, felices en su palco viendo los goles de un hijo, padre y futbolista ejemplar.

 Tras la exhibición, Mourinho le quitó del campo por Benzema. Había tenido molestias en el tobillo tras un golpe con Valera y el entrenador y el Real Madrid le necesitan para lo que sea. Cristiano, siempre comprometido, se retiró ovacionado como el héroe que es. 10 goles en 7 partidos en 2013. Una leyenda. 

 Ha conseguido meterse a todos en el bolsillo metiendo goles y dando la cara. No duerme por el Real Madrid. Tampoco un domingo por la mañana.